jueves, 7 de mayo de 2015

El carácter

Mi hijo mayor tiene mucho carácter. Según la RAE carácter es conjunto de cualidades o circunstancias propias de una cosa, de una persona o de una colectividad, que las distingue, por su modo de ser u obrar, de las demás. Vamos, que carácter, obviamente, tenemos todos.

Así que cuando digo que mi hijo mayor tiene carácter, estoy empleando un eufemismo que quiere decir que la criatura tiene mal genio. Mala uva. Mala leche, vamos. Otra acepción que he encontrado es esta: Fuerza y elevación de ánimo natural de alguien, firmeza, energía. Pues eso, que Chicote tiene mala leche, para que nos entendamos. 

Yo de pequeña era una niña bastante tranquila y obediente, de esas que se entretienen solas durante horas y no dan guerra. Pero sí es verdad que cuando me enfadaba, sacaba ese "carácter" que parece ha heredado mi primogénito con creces. 

Mi niño mayor no se relaciona pegando (suspiro de alivio) y si es un niño más pequeño el que le pega, no le responde (otro suspiro). Veremos cuando su hermanito empiece a quitarle los juguetes. Tiemblo de pensarlo...

Como el resto de niños de su edad, tiene un concepto de la propiedad privada bastante arraigado. Y eso que vivimos en un barrio bastante rojillo... Compartir no es una de sus palabras preferidas y es ver que otro niño le coge algún juguete y correr hacia ambos. Espero que se le vaya pasando con el tiempo y con la colectivización forzosa de sus bienes que llegará según crezca el Peque. 

Lo que me preocupa más son sus enfados. Ya no tiene esas rabietas incoherentes, ahora están más focalizadas y van aumentando según crece su rabia. Suelen empezar como un juego, yo le digo que haga o deje de hacer alguna cosa, y él al principio hace que no me oye o continúa desafiante. Muchas veces se ríe, como si yo estuviera jugando y él haciéndome rabiar. Al final ambos nos vamos enfadando y cuando estalla, ya no atiende a razones. No son pocas las veces que me termina dando alguna patada, pero de ahí pasa a abrazarme y va intercalando ambas acciones. Casi da risa...

Intento mantener la calma e intentar apartarlo hasta que se calma. Pasado un ratito, cuando le abrazo, ya me cuenta el motivo de su enfado. Supongo que con el tiempo se irá controlando. Eso o acabaremos en Hermano Mayor dentro de tres lustros...

Ayer hicimos un trato.Cuando nos enfademos, en vez de gritarnos o pegar, vamos a abrazarnos y a chillar muy fuerte. Le ha encantado la idea. Veremos si funciona.

No hay comentarios:

Publicar un comentario